Acción Misionera Claretiana en Camerún

En el tiempo de COVID-19

Los Misioneros Claretianos llegaron a Camerún en 1970. El año pasado, en 2020, celebramos con alegría el Cincuentenario de la presencia claretiana en Camerún. Bajo la coordinación de la Prefectura de Apostolado, hemos creado una ONG de Promoción del Desarrollo Claretiano (PROCLADE CAMERÚN). Basándonos en los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible, intentamos trabajar diariamente por el bienestar del hombre en todos sus componentes.

El año pasado, dado el contexto sanitario dominado por el COVID 19, no nos quedamos de brazos cruzados. Se emprendieron varias iniciativas para luchar contra esta pandemia. Con el apoyo de la Procuraduría General de las Misiones y de la Fundación PROCLADE INTERNACIONAL, hemos sensibilizado y distribuido mascarillas, geles hidroalcohólicos, jabón y otros alimentos a varios centenares de familias en aldeas y en varias regiones del país. Esta iniciativa se ha intensificado en todas nuestras comunidades para garantizar que se tenga en cuenta el ODS 3, que trata de la salud y el bienestar.

Otro aspecto importante que ha marcado este periodo es la atención a los niños que viven con discapacidades. En efecto, desde hace varios años, con el apoyo de la Fundación Liliane, brindamos apoyo a cientos de niños en varias áreas: salud, educación e integración social. Hoy en día, la inclusión es una exigencia en el mundo y debemos trabajar juntos para romper las barreras y considerar a las personas que viven con una discapacidad como personas de pleno derecho. Los ODS 4 y 10 nos hablan de una educación de calidad y de reducir las desigualdades. Les proporcionamos una escolarización completa y atención médica. En el noroeste del país, con la crisis anglófona en pleno apogeo, muchos estudiantes se encuentran sin escuela y se ven envueltos en ciertas lacras como el bandolerismo y la prostitución. Hemos iniciado un acompañamiento para apoyar a estos niños poniendo en marcha un proyecto de escuela de ciclo completo.

Camerún es un país acogedor, por lo que encontramos una fuerte presencia de refugiados, en su mayoría centroafricanos, en Bertoua, al este del país. A través de los proyectos agropastorales, animamos a estos refugiados dándoles un espacio libre para que se ocupen de sí mismos mediante actividades agropastorales. 

P. Conrad Atangana Essomba, cmf

Procurador